Un modelo de trabajo interesante – caso APROCOL

Las discusiones sobre los pro y los contra de los tratados de libre comercio y su influencia en el sector agrícola no tienen mucha importancia en este momento, ya que las reglas del mercado libre rigen los nuevos escenarios del comercio y el deber de los productores es construir estrategias que les permitan adaptarse y encontrar las oportunidades para sobrevivir en estas nuevas condiciones.

Al echar un vistazo a los productos con algún potencial para el mercado internacional, encontramos de manera reiterativa las frutas tropicales; y aunque al parecer las condiciones ambientales y geográficas de Colombia nos favorecen, las cifras actuales no reflejan esas ventajas; hay un camino largo por recorrer, pero lo importante es que ya se ven los esfuerzos de los productores por alcanzar la meta de posicionar nuestras frutas en un mercado con ingentes exigencias económicas, ecológicas y sociales. Es el caso de APROCOL, -Asociación de productores y comercializadores hortofrutícolas de Colombia-, localizados en La Unión, Valle del Cauca, que se ha esforzado en construir un modelo integral de producción de frutas de exportación que cumpla con las exigencias del mercado internacional. Dentro de estos esfuerzos, se está priorizando la disminución del uso de pesticidas para una producción más limpia. En este esfuerzo nos encontramos trabajando de manera conjunta para implementar el uso del acaro depredador Phytoseiulus persimilis para el control de Tetranichus urticae en cultivos de papaya en la zona del Valle del Cauca, ya que este es uno de los principales problemas fitosanitarios de este cultivo. El objetivo es disminuir las aplicaciones de acaricidas en este cultivo para obtener un producto más competitivo en términos de un protocolo desarrollado para el Manejo Integrado de Plagas con control biológico. Es importante aclarar que este Manejo Integrado no se hace exclusivamente con productos biológicos, sino que integra herramientas de control biológico, con herramientas culturales, químicas, entre otras, para obtener productos más limpios, de mejor calidad y mayor productividad. El equipo de Bichopolis tiene grandes expectativas y se siente orgulloso de poder aportar a este sector que puede llegar a tener un protagonismo importante en el sector agrícola Colombiano.